Teucro en estado de gracia

Camino menos complicado de lo previsto. El Teucro Ence quería presentarse ante el duelo clave del próximo fin de semana con los deberes bien hechos, permitirse un pequeño ‘atracón’ y afrontar con las pilas súper recargadas el enfrentamiento estelar de este sábado frente al Prasa Pozoblanco. Los pontevedreses vencieron y convencieron en Sabadell ante uno de los condenados a luchar por esquivar las plazas de descenso. Los temores venían por el comienzo del choque, siempre pendiente de una motivación exigente que se pone en entredicho cuando te enfrentas a un equipo que arrojaba unos números tan elocuentes como tres victorias en 19 jornadas. No hubo desconcentración. Víctor García, ‘Pillo’, lo demostró sacando de salida el siete de lujo y al momento se marcaron las diferencias oportunas. Sin exprimirse mucho el concepto defensivo (la novedad en el cuadro local era la presencia del lateral cubano Amanrri Cárdenas que no ofreció nada especial), la mejor arma teucrista en el pabellón vallesano fue el contraataque. El 5-1 teucrista supo estar a su nivel, bloqueando bastante al central Xavier Crivillés y el lateral Alex Picón. Benaches abrió el marcador, Coque puso el 0–2, Uribe al contraataque el 0–3 y pese al 1–3 de Axel Picón, con un poco que se entonó Bozic y Coque se hizo de oro en las transiciones, los azules pusieron la directa con el 1–6 , tras penalti transformado por el capitán, que esta vez volvió a sacar su mejor cara y se lució en ataque. Incluso el meta croata de los pontevedreses vio la cosa tan ‘arreglada’ que se permitió el lujo de lanzar de portería a portería para ver si sorprendía al meta vallesano. Los siete primeros goles teucrista eran de jugadores de la segunda línea. Dasilva, Vigo y Vermirovsky permanecieron inéditos a la hora de marcar. El de Raxó y el checo se empeñaron en busarle las cosquillas a la defensa sabadellense por el centro y no era la mejor solución.